Para aliviar y prevenir la lumbalgia posvacacional, es importante incorporar algunos ejercicios que fortalezcan la musculatura lumbar y aumenten la flexibilidad de la columna. Los estiramientos de isquiotibiales, por ejemplo, ayudan a reducir la tensión en la espalda baja, mejorando la movilidad y previniendo el dolor. También es recomendable realizar ejercicios de fortalecimiento del core, como el puente de glúteos, que estabiliza la zona lumbar y reduce el riesgo de molestias.
Otro ejercicio efectivo es la postura del gato-vaca, que mejora la movilidad de la columna, aliviando la rigidez y activando los músculos de soporte de la espalda. Esta práctica, realizada de forma suave y controlada, es ideal para preparar la columna para el día a día después de las vacaciones.
Además de los ejercicios, es esencial cuidar la postura al sentarse y evitar permanecer en una misma posición por largos periodos, especialmente si se vuelve a trabajar en una oficina o desde casa. Hacer pausas cada hora para estirar y caminar puede reducir considerablemente las probabilidades de sufrir lumbalgia posvacacional.
Incluir estos hábitos y ejercicios en tu rutina diaria ayudará a minimizar el impacto del regreso a la rutina, manteniendo la salud de tu espalda y disfrutando de una recuperación activa y sin dolor. Combatir la lumbalgia posvacacional es posible con un poco de cuidado y constancia en estos ejercicios.